EL EDITORIAL DE MIGUEL QUINTANA (07/10/2024)

esús Navas acabó su último Gran Derbi subido a los hombros de Nyland, en lo que me pareció un resumen perfecto de un partido que ganó el Sevilla por Nyland para que Jesús Navas se pudiera despedir de los derbis como merecía: subido a hombros y por la puerta grande. Navas estaba radiante. Estaba muy, muy emocionado. No podía parar de sonreír. En ese momento ya estaba sin camiseta. No la tenía porque ésta ya se había convertido para siempre en una bandera más del sevillismo. No sé si era consciente de ello, pero Navas la ondeaba orgulloso sobre uno de los banderines de córner que le vieron irse una y otra vez del lateral contrario. No soy sevillista y no puedo llegar a comprender la magnitud de lo que significa Jesús Navas para el Sevilla FC, pero si yo me emocioné con esta imagen no quiero imaginar lo que sintió cada sevillista que estaba en el Ramón Sánchez-Pizjuán. Porque su despedida no está siendo una despedida más. A Navas jugar cada partido le está costando la salud. Casi no entrena, hay días que no se puede levantar de la cama y cuando juega se tiene que marchar del estadio cojeando. Navas le está robando minutos al tiempo. Hace tiempo que se consumió el descuento que el dio el fútbol, pero dice que todavía no es suficiente y que quiere una jugada más. Jesús Navas es cualquiera de nosotros cuando siendo niños fingíamos que no escuchábamos a nuestro padre o a nuestra madre cuando nos llamaba a comer con tal de seguir jugando al fútbol con nuestros amigos del parque. Su historia es la de la pasión más genuina por su club pero también por el fútbol. Hay muchos jugadores que por el camino se olvidan de los motivos originales que les convirtieron en futbolistas. Jesús Navas los tiene tan claros como el primer día. En el mejor de los casos nos quedan 9 partidos de Jesús Navas en LaLiga. Cuatro serán en su querido Ramón Sánchez-Pizjuán. Los otros cinco será en el Lluís Companys, el RCDE Stadium, Butarque, el Metropolitano y el Santiago Bernabéu. Ojalá estemos a la altura de la despedida que merece una leyenda de nuestro fútbol. Porque no hay que ser sevillista para considerar a Navas como uno de los nuestros.See omnystudio.com/listener for privacy information.